Hiperestrogenismo en los hombres (Estrógenos altos)

Resumen:

La salud reproductiva masculina depende del nivel y la proporción de hormonas sexuales. Estos esteroides se producen en las células de Leydig (en el testículo) y en la capa reticular de las glándulas suprarrenales. 

Los hombres normalmente tienen una prevalencia significativa de hormonas «masculinas» (andrógenos) sobre las «femeninas» (estrógenos). Esta relación proporciona:

• Una espermatogénesis normal.
• El deseo sexual y la potencia.
• Mantener la masa muscular.
• Tendencia al pensamiento lógico.
• Estado psicológico estable, etc.
• El predominio del estrógeno en los hombres no es la norma. Este cambio hacia los esteroides sexuales femeninos se llama hiperestrogenia. Esta condición se manifiesta por feminización, infertilidad, depresión, etc.

Desarrollo:

La hiperestrogenia es relativa y absoluta. El primero de ellos refleja una disminución en el nivel de andrógenos.

Debido a la pronunciada falta de esteroides masculinos, el efecto de una cantidad normal de estrógeno se vuelve excesivo.

El hiperestrogenismo absoluto ocurre cuando el nivel patológicamente alto de esteroides sexuales femeninos en la sangre de los hombres.

Mientras que la testosterona y otros andrógenos también pueden ser producidos en cantidades suficientes.

Función de los estrógenos en el cuerpo masculino

Los esteroides sexuales femeninos incluyen estradiol, estrona, estriol. El primero de ellos es el principal y más potente.

 En un hombre sano, hasta 40 microgramos de estradiol se sintetizan cada día en el cuerpo.

Una cuarta parte de esta cantidad se forma en las celdas de Leydig. El 75% restante se sintetiza en otros tejidos (principalmente en el tejido adiposo).

Estradiol se deriva del esteroide masculino de la testosterona. El andrógeno es convertido en estrógeno por la enzima aromatasa.

La cantidad normal de estrógeno proporciona:

• Aumento de la densidad mineral ósea.
• Una disminución de la concentración de lípidos aterogénicos que contribuyen a la aterosclerosis.
• Mayor producción de proteínas de transporte de sangre.
• Aumento de la coagulación de la sangre;
• Suficiente turgencia tisular (retiene sodio y agua);
• Funcionamiento normal del sistema nervioso.

Causas del hiperestrogenismo:

El hiperestrogenismo es la causa del 0,5-3% de los casos de trastornos de la salud reproductiva masculina.

El estradiol elevado es más común en adolescentes y jóvenes, así como en personas mayores.

En la actualidad, este problema suele presentarse en hombres jóvenes y de mediana edad.

La hiperestrogenia ocurre:

Funcional (más del 55% de todos los casos), patológica (menos del 45% de todos los casos).

Las deficiencias funcionales no están asociadas con ninguna enfermedad o lesión grave. A veces, este desequilibrio hormonal se produce en un contexto de estrés emocional y físico.

El ayuno y el exceso de entrenamiento deportivo también pueden desencadenar un aumento en el nivel de las hormonas sexuales femeninas.

El hiperestrogenismo patológico puede ser causado por:

• Un tumor (generalmente maligno).
• Tirotoxicosis.
• Hiperprolactinemia.
• Obesidad.
• Síndrome metabólico.
• Fallo hepático.
• Fallo renal.
• Contacto con sustancias tóxicas, ambientales (disruptores endocrinos)
• Radiación.
• Tomando ciertas drogas / drogas y fitoestrógenos.

Todas estas razones afectan seriamente el equilibrio de las hormonas. Los pacientes con tales trastornos necesitan ser tratados.

Una de las causas más peligrosas de la hiperestrogenia es un tumor hormonalmente activo, generalmente un proceso maligno.

El aumento de la concentración de estrógeno en los hombres provocar:

• Neoplasia de células de Leydig.
• Tumores de células de Sertoli.
• Tumores de células granulares.
• Arrenoblastomas.
• Corticoesteroides suprarrenales.
• Tumores pituitarios (productores de LH).
• Cáncer de pulmón y de hígado con secreción de hCG.

La tirotoxicosis causa hiperestrogenismo, ya que, con el aumento de la función tiroidea, se activan las enzimas aromatasa en los tejidos periféricos.

 Además, la tirotoxicosis aumenta la concentración de globulina sanguínea ligada al sexo. Esta proteína se combina con los andrógenos y los hace inactivos.

La hiperprolactinemia siempre va acompañada de un aumento relativo del nivel de estradiol en la sangre. Esto se debe a la inhibición de las células de Leydig.

La testosterona se libera poco y el efecto de los esteroides sexuales femeninos se hace más notable. Especialmente activas en este caso, las hormonas actúan sobre el tejido de las glándulas mamarias. Esto se ve facilitado por la propia prolactina, que aumenta los receptores de estrógenos.

La obesidad y el síndrome metabólico conducen al hiperestrogenismo debido al aumento de la aromatización de los andrógenos en la periferia.

Además, la excesiva actividad hormonal del tejido adiposo suprime el nivel de gonadotropinas pituitarias, lo que lleva a una disminución en la producción de testosterona en los testículos.

La insuficiencia hepática y renal provoca intoxicación. El cuerpo acumula productos metabólicos nocivos. Su efecto tóxico suprime la síntesis de testosterona en las células de Leydig y cambia el equilibrio hacia el estrógeno.

Además, muchas enfermedades hepáticas estimulan la transformación excesiva de andrógenos en esteroides sexuales femeninos en su tejido

La radiación, los productos químicos tóxicos y otras sustancias interrumpen el funcionamiento de las células de Leydig.

Debido al hipogonadismo primario en los hombres, hay relativamente muchos estrógenos.

Los medicamentos y las drogas pueden causar hiperestrogenismo:

• Reduciendo la producción de testosterona.
• Inhibiendo la acción de la testosterona.
• Proporcionando un efecto similar al estrógeno.
• Entre las sustancias que lo pueden producir se encuentran:
• Drogas antiandrogénicas.
• Algunos diuréticos (espironolactona).
• Estrógenos.
• Glucósidos cardíacos.
• Opiáceos.
• Marihuana y hachís.
• Preparaciones de hierbas con fitoestrógenos.
• Gonadotropinas.

Los anabólicos, que a veces son utilizados por los atletas, con una ingesta no controlada, también pueden provocar hiperestrogenismo.

Signos de exceso de estrógeno en los hombres:

Si un nivel excesivo de estrógeno llega a través de la placenta hasta el feto masculino desde la madre, entonces el riesgo de desarrollar anomalías en los genitales del niño aumenta.

En los hombres adultos, se manifiesta:

• Disminución del deseo sexual.
• Impotencia.
• Infertilidad.
• Ginecomastia.
• Obesidad.
• Redistribución del tejido adiposo de tipo femenino.
• Reducción de la masa muscular.
• Disminución de la vitalidad.
• Depresión.
• Además, el hiperestrogenismo puede ser una de las causas del cáncer de mama en los hombres.

Diagnóstico y tratamiento de la hiperestrogenia:

Para diagnosticar la hiperestrogenia, se utiliza un examen completo. En primer lugar, se recoge la historia más completa (herencia, enfermedades anteriores, enfermedades crónicas, medicamentos utilizados, estilo de vida, dieta). 

Análisis sanguíneo:

• Andrógenos (testosterona total y libre, etc.)
• Estrógeno (principalmente estradiol)
• Gonadotropinas (LH y FSH)
• Prolactina
• Tirotropina
• Globulina Transportadora (SHBG)
• Inhibina B;
• La hormona antimulleriana.
• Progesterona
• Dehidroepiandrosterona
• HCG
• Una ecografía de la próstata y el escroto y un espermiograma, si es necesario.

Adicionalmente, puede solicitarse:

• Resonancia de la hipófisis
• Tomografía suprarrenal
• Ecografía abdominal
• Ecografía de los riñones y las glándulas suprarrenales

 Conclusiones:

Después de que se confirma el diagnóstico y se identifican las causas de la hiperestrogenia, el médico elige las tácticas de tratamiento necesarias.

Para el tratamiento de la hiperestrogenia puede ser recomendado:

• Medidas conservadoras (normalización del régimen diario, ejercicio físico moderado nutrición adecuada, restricción de fitoestrógenos, rechazo de ciertos fármacos.
• Rechazo de malos hábitos, no consumir anabolizantes, aunque se lo recomiendes sus compañeros del gimnasio.
• Tratamiento de las condiciones que causan hiperestrogenia (tratamiento de tirotoxicosis, obesidad, hiperprolactinemia 
• Tratamiento farmacológico (inhibidores de la aromatasa, antiestrógenos, etc.) y
• Tratamiento radical (extirpación de tumores hormonalmente activos).

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